Agorafobia

Y tal vez te preguntes: ¿ por qué me pasa esto ahora si nunca había tenido problemas para hacer estas cosas? Pues lo más probable es que antes no hubieras tenido un ataque de pánico o ansiedad, que es precisamente lo que suele disparar este problema.

Mis pacientes comentan: “Bueno si,…hace un tiempo tuve un episodio que lo pase fatal…creí que me moría….fui a urgencias y me dijeron que era un ataque de pánico o ansiedad”

Pero,  ¿qué es un ataque de pánico ?

El ataque de pánico es una respuesta de ansiedad enorme ante algún estímulo (del que no tenemos porqué ser conscientes)  que hace que tu cuerpo ponga en marcha una serie de respuestas fisiológicas que pueden hacer que pienses que te está pasando algo muy grave (un ataque al corazón, que te estás volviendo loco…).

Normalmente el temor a salir, o a ir a determinado sitios donde hay mucha gente se da porque se tiene miedo de que en algún momento pueda repetirse el episodio de ataque de ansiedad que se dió con anterioridad.

Lo normal cuando te ocurrió aquello es que te asustaras muchísimo si no sabías lo que te estaba ocurriendo, porque la respuestas que da el cuerpo es la misma que daría para salir huyendo a toda prisa, por lo que necesita preparar al cuerpo para este “sprint” . Necesita coger mucho oxígeno (hiperventilación) y acelerar el corazón para que este lo pueda impulsar a través del riego sanguíneo a nuestros músculos, así que es probable que sientas como tu corazón se acelera sin saber porqué, que te sientas agitado, que te suden las manos, que tengas sensación de ahogo, incluso mareos… (se pueden sentir muchas más cosas u otras diferentes)

Por un lado estas sintiendo todo esto. Al no saber saber porqué está pasando, sientes “peligro”, y esa respuesta de miedo hace que los síntomas se mantengan y aumenten, con lo que la sensación es cada vez peor. Y  asi entras en un ciclo muy dificil de manejar si no sabes como.

Todo lo que nos recuerde este episodio, hace que empecemos a temer el que nos pueda pasar lo mismo en algún sitio dónde sintamos que no podemos escapar o en el que no podamos recibir ayuda, como pueden ser los lugares con mucha gente (centros comerciales, el metro…). Y cómo lo habitual cuando tememos algo es evitarlo, empezamos a evitar dichos lugares.

El problema de la evitación es que mantiene el problema.

Para solucionar el problema tienes que sentir que puedes permanecer en esos lugares sin que ocurra nada malo y al evitarlos lo único que pruebas  es que si no vas a esos lugares no pasa nada, por lo que es fácil que cada vez vayas evitando más y más sitios y acabes sin salir de casa, el  lugar donde te sientes segur@.

Así que para  tratar la agorafobia nos vamos a centrar en entender que es lo que te está ocurriendo, cuáles son tus síntomas de ansiedad para así manejar la variable del “miedo al miedo” que se da en estos casos. Las técnicas de respiración, relajación y Mindfulness van a ayudarte a poder exponerte a las situaciones temidas y poder gestionar la ansiedad que se pudiera disparar.

La causa de tu ataque de pánico inicial puede ser debido a un estrés excesivo (los ataques de pánico suelen ocurrir cuando la fuente de estrés cesa) o a la expresión de algún trauma que haya podido acontecer en tu vida y que este asociado a algo que ocurrió en el momento del ataque. En cualquier caso, vamos a rastrear las posibles causas y tratarlas.